GRACIAS A UNA INVERSIÓN SUPERIOR A LOS 60 MILLONES DE PESOS LOS RECIÉN NACIDOS CUENTAN CON LO MÁS MODERNO EN CUNAS RADIANTES PARA ENTREGARLES UN MEJOR PROCESO DE RECUPERACIÓN
Cinco nuevas cunas radiantes fueron las adquiridas por el Hospital San Camilo para su Unidad de Cuidados Intensivos de Neonatología con la finalidad de renovar completamente el equipamiento con el que se atiende a los recién nacidos que se hospitalizan en dicho servicio.
La compra de estos equipos por parte del establecimiento tuvo un costo total superior a los 60 millones de pesos y permite entregar equipamiento de última tecnología que, entre otras cosas, cuenta con nuevos sistemas de climatización para el bebé de manera que siempre esté con la misma temperatura, así como la posibilidad de monitorizar el peso de manera permanente.
“El servicio de Nenoatología siempre se ha destacado por su calidad y modernidad con indicadores que lo sitúan dentro de los mejores del país y nuestros usuarios así lo perciben, por lo que esperamos que se valore este y otros esfuerzos que hacemos por mejorar nuestra calidad de servicio y, a la vez, nos ayuden a cuidarlos y protegerlos, ya que es un beneficio para todos los recién nacidos del Valle del Aconcagua”, señaló la Dra. Carmen Meléndez, Directora (S) del Hospital San Camilo.
La compra de este nuevo equipamiento que estará instalado dentro de los próximos días, permite a su vez, que los equipos que se utilizaban hasta ahora en la UCI neonatal sean utilizados por la sala de cuidados intermedios, mejorando de esta manera el equipamiento de todo el Servicio, que ya había sido beneficiado con la llegada de monitores y ventiladores de alta frecuencia.
Cabe recordar que el Servicio de Neonatología atiende a recién nacidos con problemas de salud o con prematurez, quienes actualmente tienen una sobrevida del 95%, y un 78% en el caso de los prematuros extremos, a quienes cuidan y mantienen en control hasta los 10 años y más si es necesario.
Y es que cada año, sólo en el hospital San Camilo, nacen más de 100 bebés en estado prematuro y entre 30 y 50 en estado de prematurez extrema, es decir de menos de 32 semanas y/o 1500 gramos, lo que significa que requieren un tratamiento adecuado y un estricto seguimiento médico.