En sus manos está el cuidado de los pacientes más graves que se atienden en la zona

                                   

Creada en agosto de 1994, la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital San Camilo cumple 30 años dedicada a entregar salud de calidad a los pacientes más graves del Valle del Aconcagua.

En efecto, la UCI inició sus funciones en el mes de Agosto de 1994, en las dependencias para ella dispuesta en el nuevo Hospital entregado a la comunidad en Diciembre de 1993, destacando que antes de su inauguración, los pacientes de los provincias de San Felipe y Los Andes que requerían soporte de intensivo, eran derivados al Hospital Gustavo Fricke o al Hospital Carlos Van Buren; con los riesgos inherentes del traslado de un paciente inestable y las dificultades de obtener un cupo de cama crítica en Servicios de Salud con alta carga asistencial.

De esta manera, cumpliendo un sentido anhelo de la comunidad, la UCI inicia gradualmente su labor asistencial, con desarrollo tecnológico limitado a monitoreo invasivo y posibilidad de 4 cupos de ventilación mecánica, con requisitos sencillos.

“En el curso de los 10 primeros años se logran ampliar los cupos de soporte ventilatorio, ampliar la complejidad del monitoreo y terapias, incorporar soporte renal con hemodiálisis convencional, protocolizar las acciones técnicas y desarrollar un equipo humano entrenado y mejor calificado; permitiendo atender pacientes cada vez más complejos de nuestro servicio de salud y conectarse a la Red de Intensivo de la Quinta Región”, aseguró el Dr. Navor Uribe, actual jefe de la Unidad.

Para conmemorar este aniversario, la UCI realizó una ceremonia en donde se reconoció a los tres funcionarios que están desde el primer día: Rubén Pinares, Dr. Francisco Manríquez y Leonardo Oyaneder, quienes recibieron un galvano de reconocimiento. En la oportunidad, también reconocieron a quienes poseen de forma destacada el “espíritu UPC”, en donde destacan valores como la entrega, responsabilidad, alegría, empatía, compañerismo y el servicio por el otro, no solo con el usuario, si no que con sus compañeros en su día a día, siendo reconocidos Melissa Saa,  Dr. Roman Piñones,  Alfredo Zambrano,  Lorena Romero, Katherine Ponce y Constanza Cabezas.

En la ocasión, el Director también hizo entrega de una placa conmemorativa de esta fecha como forma de agradecimiento a todo el trabajo realizado. “Sin duda alguna, esta UCI es un ejemplo para todos en cuando a su capacidad técnica y por sobre todo humana. Estamos muy orgullosos de contar con una unidad de estas características”, aseguró Dr. Rodrigo González, Director del establecimiento.

Cabe destacar que el desarrollo de la UCI permitió que los Servicio de Cirugía, Medicina, Urgencia y Obstetricia pudieran contar con camas adecuadas para sus pacientes más graves, evitando la derivación a otros Hospitales y a la vez desarrollando las técnicas específicas de Subespecialidad respectiva en la atención de pacientes complejos. Este desarrollo técnico y humano, naturalmente también repercutió positivamente en la calidad de atención de pacientes menos complejos.

El desarrollo de la UCI permitió a su vez el establecimiento gradual de neurocirugía en el Servicio de Salud Aconcagua con los beneficios consabidos en la atención.

El gradual aumento de la demanda asistencial exigió la optimización del uso de camas de UCI, haciéndose imprescindible el desarrollo de una Unidad de Tratamientos Intermedios (UTI) adosada, que permita contar con camas equipadas en forma proporcional a las necesidades de cada enfermo, la cual inició sus funciones en el primer semestre del 2007, completando la estructura de Unidad de Paciente Crítico indispensable para cumplir con el concepto de cama proporcional a los requerimientos del paciente y optimizando el funcionamiento de las camas de paciente crítico.

“Sin duda, uno de nuestros grandes desafíos fue la pandemia, la cual requirió un esfuerzo nunca antes visto que nos obligó a cuadruplicar nuestras camas, desafío que con el tiempo demostró que estábamos consolidados como equipo de alto desempeño”, agregó el facultativo.

Gracias a lo anterior, actualmente la Unidad de Paciente Crítico cuenta con 12 camas de cuidados intensivos y 15 de cuidados intermedios, ofreciendo una atención integral del paciente grave de alta complejidad gracias a sus cuidados especializados y al estar constantemente adicionando nuevas técnicas y avances tecnológicos, los que sumandos a la alta competencia técnica de sus funcionarios, hacen de esta unidad un verdadero lujo para la salud del Valle del Aconcagua.

 

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